Síndrome Metabólico y Riesgo Vascular

Introducción

Hoy en día, el estilo de vida está caracterizado por una abundancia calórica, actividad física reducida y aumento de la esperanza de vida, lo cual ha disparado durante las últimas décadas la incidencia de obesidad a proporciones epidémicas, especialmente en países desarrollados, y siendo particularmente alarmante en la población infantil. Este incremento en la incidencia de obesidad lleva asociado un conjunto de patologías metabólicas entre las que se incluyen la diabetes mellitus tipo 2, la enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA) y la ateroesclerosis, que han motivado la investigación dedicada a esclarecer los mecanismos moleculares que las desencadenan. A esta agrupación de factores de riesgo cardiovascular y metabólico se conoce como síndrome metabólico (SM), así que la EHGNA se considera como la principal manifestación hepática de dicho síndrome. De acuerdo con los últimos datos, se ha convertido en la principal causa de enfermedad hepática crónica en el mundo occidental cuya prevalencia entre individuos diabéticos y obesos se encuentra en torno al 75-90% frente al 20-30% de la población general. Mientras que la mayoría de los pacientes con EHGNA presentan la enfermedad de manera asintomática con un simple depósito de grasa en el hepatocito (esteatosis, ESNA), el 20% de los individuos acaban desarrollando inflamación hepática crónica o esteatohepatitis no alcohólica (EHNA) con estadíos variables de fibrosis concomitante, que a su vez puede conducir hacia estados más graves de enfermedad hepática como cirrosis, hipertensión portal e incluso carcinoma hepatocelular. El diagnóstico y el tratamiento precoz de la esteatosis hepática son importantes para prevenir el desarrollo hacia estados más graves de dicha enfermedad hepática. Como la EHGNA suele ser asintomático en el momento del diagnóstico, la determinación del contenido lipídico del hígado plantea un desafío importante en términos de identificación, tratamiento y control de la progresión de la enfermedad.  Actualmente no disponemos de ningún método no invasivo validado que cuantifique la probabilidad de enfermedad histológica avanzada en la EHGNA  o la evolución de una fase histológica a otra. Por otro lado, el abordaje terapéutico de la EHGNA se basa en modificaciones en el estilo de vida, dieta, ejercicio, medicamentos específicos para tratar la disfunción hepática y los factores de riesgo, como obesidad, hiperlipemia y diabetes, ya que no existe un tratamiento específico para esta enfermedad. Nuestro laboratorio desarrolla una investigación traslacional enfocada al estudio de las bases moleculares del Síndrome Metabólico y sus comorbilidades, centrándose en la búsqueda de nuevas dianas moleculares implicadas en la progresión del daño metabólico, hepático y vascular que pueden ser la base para el desarrollo de nuevos tratamientos y/o pueden dar lugar a la generación de nuevos biomarcadores directos para el diagnóstico no invasivo de las diferentes fases evolutivas de la EHGNA, contribuyendo así al diseño de nuevas herramientas diagnósticas más eficaces y menos invasivas que las actuales.


González Rodríguez, Agueda
Científico Titular



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